Deyna Castellanos, la mejor futbolista venezolana por lejos, está terminando su carrera universitaria y está a punto de dar el paso al fútbol profesional.
En la NWSL, la National Women Soccer League, es una jugadora altamente apreciada y todos la quieren en su plantilla.
El gran pero es el sistema estadounidense, el reglamento por el cual los nuevos valores del fútbol femenino ascienden a profesional.
Eso a Deyna no le favorece, no le gusta y lo ha dicho públicamente: “Me encantaría considerar la NWSL como opción, pero es difícil hacerlo cuando las reglas no nos favorecen”.